La suave brisa del océano acaricia mi cuerpo. Un rayo de sol se cuela entre la fina mosquitera…piel de gallina. Respiro profundamente… espuma de mar. Abro los ojos… ¿dónde estoy?
Las vistas son de impresión… ¿es un sueño? Sí, sin duda lo es y no quiero despertar nunca. James Bond me ha traído en su lancha hasta su maravillosa isla privada. Por mí como si me deja aquí secuestrada para siempre…
Frente a mi cama, desde la Ocean Panorama Pool Villa del Six Senses Yao Noi, miles de islotes calcáreos brotan del mar de Andamán como torres veladas del bosque. La paleta de colores de la bahía de Phrang Nga adquiere una fosforescencia especial, casi de ficción, con un brillo distinto que pinta de pura belleza el paisaje.
Tengo la imperiosa necesidad de poner los pies en el suelo. Algo que me ayude a procesar la realidad que vivo en este momento… Me asomo a la terraza. Veo un junco alejarse entre la neblina de la mañana. El tiempo se detiene…la bahía aparece tal y como podría haberse aparecido hace siglos, en calma, con esa atemporalidad que tienen los lugares cuando no los compartes con nadie…
Explore the moments… Six Senses Yao Noi.
NUBA Playas Asia
Inés García, Directora de Marketing y Comunicación de NUBA
Que maravilla!!
Hola quiero estar allí¡¡ Ya. El paraiso.
Me ha encantado, que pasada de hotel, me lo pido de luna de miel 😉
Qué maravilla! Me ha encantado! Me he transportado allí por unos minutos…